28 nov 2017

TESLA GANA LA APUESTA: FABRICA LA BATERÍA MÁS GRANDE DE LITIO EN 100 DÍAS

Todo comenzó con una apuesta en Internet. El presidente de Tesla, Elon Musk, dijo en Twitter que si no conseguía completar el proyecto en menos de 100 días, asumiría el coste de la deuda por la fabricación de la batería de litio más grande del mundo. Esto suponía que el gobierno del sur de Australia no tendría que pagar los 42 millones de euros de este hito tecnológico. Pero finalmente, Musk ha ganado la apuesta y ya ha confirmado que tiene preparada la mega batería para comenzar su fase de pruebas.

Una vez que se haya probado que funciona correctamente será emparejada con el parque eólico de Hornsdale, a unos 200 kilómetros de Adelaida (ciudad principal del estado). La idea es que almacene el exceso de energía creada por las turbinas eólicas hasta 100 megavatios de capacidad para usarla como y cuando se quiera. De esta manera, quieren evitar los cortes de suministro que sufrieron en septiembre de 2016 tras una serie de grandes tormentas que llegaron a dejar sin energía a 1 millón 700 mil residentes.

25 nov 2017

Expertos proponen que 25 % coches nuevos en Alemania sean eléctricos en 2025

El consejo de expertos del Gobierno alemán para cuestiones medioambientales propuso hoy que para 2025 al menos el 25 % de los nuevos turismos y camiones ligeros incorpore un motor eléctrico como medida para atajar el cambio climático.

Ésta es la aportación más destacada de un informe especial de este organismo presentado hoy en el que se destaca que "el sector del transporte aún no ha hecho ninguna contribución a la reducción de las emisiones de gases contaminantes".


"El coche eléctrico es muy eficiente y está listo para su comercialización. Debemos hacer ya la transición rápidamente", aseguró en rueda de prensa en Berlín la presidenta de este consejo asesor, Claudia Kemfert, profesora de Medioambiente y Salud en la Universidad de Bielefeld.

Para facilitar este objetivo, el documento considera necesario mejorar la red de puntos de carga para vehículos eléctricos y pide que se mantengan más allá de 2020 las ayudas gubernamentales para la instalación de torres de recarga en todo el país.

Además, el documento indica que, por motivos medioambientales y sanitarios, debe acabarse con el hecho de que el combustible diésel tenga una menor tasa impositiva que otros carburantes, así como en general con todas las subvenciones que perjudican al medioambiente.

El Ejecutivo federal se fijó en 2008 el objetivo de colocar un millón de vehículos eléctricos en las calles alemanas para 2020, una meta que no va a alcanzar, según reconoció este año la propia canciller alemana, Angela Merkel.

España y el coche eléctrico: "Nos van a comer por todos lados si no espabilamos"

Arturo Pérez, director gerente de la Asociación Empresarial para el Impulso del Vehículo Eléctrico;

A pesar de que nuestro país necesita cientos de miles de vehículos eléctricos para cumplir con los requisitos de reducción de emisiones exigidos por la UE para el 2050, aún vamos a la zaga en lo que a implantación se refiere. Mientras el Gobierno trata de fomentar este tipo de transporte limpio con el plan de ayudas MOVALT y las administraciones locales y regionales ponen en marcha sus propias iniciativas de estímulo, los consumidores continúan dudando debido a los precios, la escasez de puntos de recarga y la limitada autonomía de los automóviles.

No solo se trata de comodidad, silencio y mejora de la salud por el descenso de la contaminación. “Desde el punto de vista industrial, corremos el riesgo de perder competitividad, empleo y liderazgo en un sector tan importante como es la automoción, que también está ligado a la eficiencia energética y al mercado eléctrico”, recalca Pérez. La Agencia Europea del Medio Ambiente estima que, si el 80 % del parque de vehículos fuera eléctrico, el continente necesitaría aumentar su capacidad de producción de energía 150 gigavatios (un 15 % de la actual). Solo España debería incrementar su producción en un 8 %.

A pesar de que en nuestro país hacen falta alrededor de 300.000 unidades y 11.000 electrolineras para cumplir con los objetivos de reducción de emisiones de la UE para el 2050—una oportunidad para las empresas del sector—, en España se fabrican tan solo tres modelos. El número total de vehículos eléctricos ‘made in Spain’ fue de 10.081 el año pasado (solo un 5,7 % fue a parar al mercado español), una cifra que apenas representa un 0,3 % del total de la fabricación automovilística, según datos de ANFAC, la patronal del sector.

“Nos van a comer por todos lados si no espabilamos, y vamos a perder muchas cosas, entre ellas la salud, la competitividad y el empleo”, sentencia Pérez.

Rosa Martínez: “Si no fabricamos coches eléctricos los importaremos de China e India”


La industria automovilística en Europa tiene mucho peso y tiene una capacidad de hacer lobby muy fuerte. Por ejemplo, el caso de Alemania. A finales de agosto y en pleno ambiente pre-electoral, se celebró una cumbre del diésel, en la que el Gobierno, con los fabricantes de motores diésel, se comprometió a apoyar una inversión en tecnología para hacer unos propulsores de gasóleo limpios. Eso es ir hacia atrás: es apostar por el pasado y no por el futuro. En el imaginario social de Alemania el diésel, la industria del automóvil, tiene mucho peso, pero hay que ser valientes y tener una visión estratégica. China e India han entendido esto perfectamente y aspiran a que en unos años el 80% de sus coches sean eléctricos. En Europa estamos a la cola. O somos capaces de producirlos aquí, generar mercado, o los vamos a tener que importar.

Manhattan tendrá en 2019 la mayor instalación privada de autoconsumo solar de EE.UU


La isla de Manhattan, en Nueva York, contará en 2019 con la mayor instalación fotovoltaica de autoconsumo multirresidencial privada de Estados Unidos. El Proyecto Solar StuyTown, presentado el 8 de noviembre, consiste en un sistema de energía solar de 3,8 MW y 9.671 paneles que ocuparán unas 8,90 hectáreas y producirán energía suficiente para abastecer a más de 1.000 apartamentos anualmente.


El Decálogo del Autoconsumo

La comercializadora de electricidad Feníe Energía acaba de publicar un documento –«Un año de Sol»– en el que (1) evalúa el Real Decreto de Autoconsumo, (2) señala sus “incoherencias y contradicciones” y (3) propone alternativas para mejorar ese decreto. Feníe Energía presenta además en esa obra, con todo lujo de detalles, varios casos de éxito (de instalaciones de autoconsumo que ya están funcionando) y, por fin, propone diez motivos que demuestran que lo sensato y lógico es que España promueva, como país, el autoconsumo, solución de ahorro de energía que aúna las dos claves del nuevo modelo energético: la eficiencia y la generación distribuida a partir de fuentes renovables. Este es su Decólogo del Autoconsumo.


1. Menor dependencia de las naciones que nos venden los combustibles fósiles y nos compran armas.

2. Más justa distribución de la riqueza. 

3. Beneficios socioeconómicos.

4. Competitividad de la industria española de cualquier sector

5. Marca España. El Sol es un recurso autóctono. 

6. Aumenta la Eficiencia.

8. Promueve ciudades más sostenibles.

9. Ayuda a cumplir los acuerdos internacionales sobre el cambio climático.

10. Hace partícipe al ciudadano en la gestión energética de sus instalaciones.

La absurda situación del autoconsumo en España

En un país que gasta 120 millones de euros diarios en importar combustibles fósiles y que tiene una alta dependencia energética del exterior, ya que importa más del 70% de la energía que se consume, parecería razonable que existiera una política energética clara enfocada al ahorro energético y al desarrollo sin trabas de las energías renovables. Una energía limpia que ha demostrado su viabilidad económica y que en España tenemos en abundancia. Nada más lejos de la realidad. Vivimos una situación que, al menos, es paradójica.

Una instalación FV domestica para autoconsumo puede costar alrededor de 1.5 €/Wp. Una instalación de 2.0 kWp debería ser suficiente para producir al cabo del año el consumo eléctrico de una vivienda unifamiliar en el Sur de España, lo que supone una inversión de 3.000 €. Una instalación de estas características es capaz de producir un ahorro anual del 40% de la energía que consume la vivienda.

Con esta decisión hemos conseguido ya las siguientes ventajas:

Invertir dinero en un sector económico que genera puestos de trabajo, activando la economía productiva.

Disminuir las necesidades nacionales de importación de combustibles fósiles.

Aumentar la eficiencia del sistema eléctrico, al generar energía eléctrica en el lado del consumo, por lo que evitamos las pérdidas que se producen en las redes de distribución.

Evitar emisiones contaminantes a la atmósfera, lo que contribuye a mejorar la calidad del aire.

Un usuario de autoconsumo paga en su recibo su término de potencia, tasas, impuestos y energía consumida exactamente igual que cualquier usuario de la red eléctrica, el único efecto es que consume un 40% menos, lo que le supone un ahorro en términos monetarios en el recibo de alrededor del 30%. Por término medio entre 200 y 250 euros anuales. Esto nos lleva a plazos de amortización superiores a los 10 años.

Si se inyecta a la red a las horas de mayor insolación, mediodía, y en mucha mayor cantidad en verano que en invierno, lo que ayuda a cubrir los picos que se producen por uso del aire acondicionado, y ayuda a estabilizar la red. Además, con este tipo de instalaciones usamos menos recursos fósiles en verano para la generación eléctrica, que es cuando menos recursos hidráulicos tenemos y, como consecuencia, cuando se han producido fuertes subidas en el precio de la electricidad, es decir, ayudamos a reducir los costes de la energía eléctrica.

Además, esta energía, producida en consumo, se inyecta en la red y es consumida por el vecino más próximo, que paga a la compañía eléctrica el mismo precio por esta energía que por cualquier otra que consuma. Sin embargo el productor, en este caso, no recibe una justa compensación económica por la misma. Un sencillo cálculo nos dice que una instalación de 2.0 kWp inyecta a la red alrededor de 1600 kWh al año, que a un precio medio de pool de 0.05 €/kwh supone dejar de cobrar 80 € por la producción de energía, al igual que cualquier otro productor cobra por la energía que inyecta al sistema. Cobrar por esta energía, no sólo sería más justo, sino que ayudaría a hacer estos sistemas más rentables. En cambio, alguien ha vendido esa energía por un valor de mercado aproximado de 220 €, beneficiándose económicamente.

¿Y si el autoconsumidor llegara a un acuerdo con sus vecinos para aprovechar esta energía sobrante? Tampoco lo permite la ley en España.

Las instalaciones de autoconsumo sólo tienen ventajas para los ciudadanos, para el sistema eléctrico, para nuestra economía y para el medioambiente.

Desde la Fundación Renovables estamos convencidos de que el autoconsumo está llamado a ser un instrumento clave para transformar el modelo energético en la Unión Europea. ¿A qué esperamos?

El Gobierno, abierto a la supresión de las trabas en el autoconsumo


El Foro Solar, organizado por UNEF (Unión Española Fotovoltaica), clausuró su cuarta edición celebrada los días 21 y 22 de noviembre en Madrid con unas perspectivas un poco más optimistas para el sector. El secretario de Estado de Energía, Daniel Navia, que intervino en la jornada inaugural, resaltó que el Gobierno está "abierto a la eliminación de las trabas administrativas" en elautoconsumo y a la apertura de espacios de colaboración. Navia subrayó el alto desarrollo de la tecnología fotovoltaica, "que ya compite sin apoyos, o con apoyos reducidos", y el papel crítico que jugará en el futuro sistema energético.

La segunda sesión del foro, el 22 de noviembre, puso de relieve que la implantación del autoconsumo es viable en todos los sectores económicos y constituye un eje fundamental de este cambio de modelo energético. En este sentido, Paolo Frankl, director de la División de Energías Renovables de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), indicó que en el caso de España la fotovoltaica representará un 25% del mix energético en los próximos cinco años, pero apuntó que, para ello, se necesitan sistemas, políticas y redes más flexibles; "la tecnología va más deprisa que la política", añadió.

Una de las claves en esta transición es, precisamente, el desbloqueo al autoconsumo eléctrico, una de las principales demandas que hacen desde UNEF. En opinión de Barredo, el autoconsumo “es el futuro” y el sector espera que se empiece a regular ahora tras la reciente sentencia del Tribunal Supremo. En este sentido, desde la patronal se pide claridad en los procedimientos y regulaciones y que las Comunidades Autónomas colaboren.

Además, según Barredo, el autoconsumo “liberalizado” no supondría una amenaza al sistema eléctrico porque la potencia máxima que se podría instalar rondaría los 250 MW y el sistema dejaría de ingresar unos 4 millones de euros al año, menos de un 0,02% de los costes del sistema.

Desde la Fundación Renovables defienden la relevancia de la energía fotovoltaica como elemento “primordial” para romper el modelo de oferta y para “potenciar el papel del consumidor”. “Cualquier tecnología que llegue nueva no preocupa si llega desde el lado de la oferta, al sector energético tradicional lo que le preocupa es que llegue del lado de la demanda”, ha expuesto Fernando Ferrando, presidente de la fundación.

“La fotovoltaica va a ser un elemento fundamental no de un cambio de modelo energético, sino que va a provocar un cambio en el comportamiento de los que somos verdaderamente actores en el mundo energético, los consumidores”, ha agregado señalando que esta es una de las claves por las que los gobiernos a la hora de regular o las empresas ofrecen resistencias ante este cambio. “Esta tecnología va a romper el modelo de oferta y los consumidores pasarán a ser ciudadanos”.

Según las estimaciones de UNEF, si la capacidad de generación fotovoltaica aumenta entre 500 MW y 1.000 MW anuales en grandes instalaciones y entre 150 MW y 300 MW anuales en pequeña generación distribuida hasta 2025, la reactivación de la actividad industrial y del sector sumarían 17.000 puestos de trabajo directos y sumaría al PIB sectorial más de 4.000 millones.