6 nov 2025

“No sobra energía renovable: falta almacenamiento”

Se oye con frecuencia que España “produce más energía renovable de la que puede consumir”. Que los aerogeneradores se paran, que las placas solares vierten electricidad que nadie quiere, que hemos llegado al techo verde.
Pero los datos cuentan otra historia: no nos sobra energía limpia; lo que falta es la capacidad para guardarla y aprovecharla cuando se necesita.


🌞 España ya es una potencia renovable

En 2024 las renovables cubrieron un 56,8 % de la electricidad del país, un récord histórico.
El reto no es la generación, sino la coincidencia entre producción y consumo: hay horas con sol y viento de sobra y otras en las que la demanda se dispara justo cuando la generación baja.
Por esa falta de flexibilidad, se desperdicia cerca de un 8 % de la energía renovable disponible, suficiente para alimentar dos millones de hogares.


🔋 El almacenamiento es la pieza que falta

Con 10 GW de baterías —solo la mitad de lo previsto para 2030— podríamos recuperar casi dos tercios de la energía que hoy se pierde y reducir el uso de gas en más de 8 TWh al año.
El sistema sería más estable, más limpio y más independiente.
Lejos de ser un lujo tecnológico, el almacenamiento es la infraestructura que convierte cada kilovatio verde en energía útil y competitiva.


🏭 Centros de datos e industria: parte de la solución

Los centros de datos, que algunos ven como un problema de consumo rígido, pueden ser aliados si se integran en la red y adaptan su carga a las horas de mayor producción renovable.
Así actúan como anclas de estabilidad, absorben los excedentes y consolidan la red.
Al mismo tiempo, atraen inversión tecnológica y empleo cualificado, reforzando el tejido productivo y digital del país.


🇪🇸 Energía propia, precios más bajos, país más atractivo

Cada kilovatio almacenado y reutilizado es gas que no se importa y precio que no depende del mercado internacional.
Con más almacenamiento y mayor uso de renovables, la electricidad sería más barata y estable, convirtiendo a España en uno de los destinos más competitivos de Europa para invertir y producir.
Eso atrae industria, impulsa el consumo y crea un círculo virtuoso: más demanda limpia, más estabilidad, más crecimiento.


🛡️ Energía y defensa: la independencia también se mide en megavatios

Cada crisis energética reciente ha demostrado que la seguridad nacional depende de la seguridad energética.
De hecho, algunos estrategas y oficiales militares estadounidenses y europeos ya sostienen que invertir en renovables y almacenamiento debería computarse como parte del gasto en defensa, porque reducir la dependencia de combustibles externos fortalece la soberanía y la resiliencia ante conflictos o chantajes energéticos.
España, por su posición geográfica y su potencial solar y eólico, puede convertir esa visión en realidad: una defensa basada en la autosuficiencia energética y en la estabilidad de su red eléctrica.


⚙️ De “falta de demanda” a “exceso de oportunidad”

El verdadero límite no está en la demanda, sino en la capacidad de aprovechar lo que ya producimos.
El almacenamiento —junto con redes inteligentes y precios dinámicos— no es un parche, sino el nuevo eje de estabilidad económica, energética y estratégica.
España no tiene un problema de exceso renovable: tiene una oportunidad histórica para convertir su sol y su viento en prosperidad, seguridad y liderazgo.