"Existen 25 millones de viviendas en España que, con una inversión a partir de los 3.000 euros, pueden ver reducido su consumo de electricidad a la mitad. Hablamos de un potencial negocio de 75.000 millones", afirma José María Gil, director de Servicios y Grandes Cuentas de Leroy Merlin.
La compañía registró una facturación de 2.653 millones en el mercado español en 2019, pero su plan de negocio contempla elevar la cifra por encima de los 4.000 millones en tres años y que una cuarta parte de estos ingresos, en torno a 1.000 millones, se genere diversificando su negocio a espacios donde la empresa tiene ahora un peso testimonial.
Uno de estos nichos es la energía renovable a través de la biomasa, la geotermia o aerotermia pero, sobre todo, la fotovoltaica. La compañía ha elevado su número de referencias relacionadas con esta categoría de negocio de 5.100 a 6.860 en apenas un año, aunque su objetivo no es tanto vender productos sino proyectos llave en mano.
"Se trata de un servicio que va desde ir a ver su tejado y analizar tu consumo hasta elegir el número de placas que te hacen falta, montarlas y dejarle todo el sistema funcionando. Estamos hablando con comunidades de vecinos, pero el grueso del negocio se concentra en viviendas unipersonales", indica Pilar Pérez, jefa de producto de Energías Renovables de Leroy Merlin.