El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico acaba de anunciar que va a destinar hasta 700 millones de euros a la puesta en marcha de nuevas instalaciones de almacenamiento energético a gran escala "que proporcionarán mayor flexibilidad al sistema eléctrico y favorecerán la integración de las energías renovables". Para ello, el Ministerio abre una convocatoria de solicitudes de ayuda a la que pueden acudir todos los interesados en desarrollar (1) proyectos de almacenamiento de energía independientes (stand-alone), (2) bombeos reversibles, (3) sistemas térmicos de almacenamiento de energía y (4) sistemas de almacenamiento hibridado con fuentes de generación renovable, nuevas o existentes. Los beneficiarios podrán solicitar anticipos de hasta el 100% del importe de la ayuda concedida.
«Este impulso al desarrollo del almacenamiento energético contribuirá a asegurar la transformación del sistema energético para que sea más flexible, robusto y resiliente. Con el refuerzo de esta tecnología se logrará también una mayor penetración de las fuentes de energías renovables en el sistema eléctrico español, ya que el almacenamiento actúa como un elemento habilitador y de gestión.
Asimismo, se espera que el incremento de este tipo de instalaciones aumente la flexibilidad del sistema permitiendo una mayor penetración de las energías renovables, reduciendo los costes de la energía.
Las ayudas reducirán al mismo tiempo la dependencia de España de los combustibles fósiles, al incrementar la participación renovable en el mix eléctrico, haciendo frente a la crisis climática, en línea con lo establecido tanto por el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima como por el Plan REPower EU.
Además de facilitar la descarbonización del sistema eléctrico español, el apoyo a estos sistemas de almacenamiento fortalecerá el desarrollo de un tejido industrial europeo capaz de suministrar equipos, fabricar o ensamblar componentes y mantener proyectos de almacenamiento con las distintas tecnologías existentes (baterías, sistemas de bombeo y almacenamiento térmico). Seguirá así los pasos del sector eólico y fotovoltaico, en los que España es ya autosuficiente en capacidad tecnológica y productiva»