Las warkawater son torres recolectoras de agua capaces deabastecer a una
familia de siete miembros. Su coste es ínfimo comparado con el de un
pozo y permiten mejorar la calidad de vida de toda una comunidad.
Uno de los principales motivos por los que el tercer mundo se mantiene
por debajo del umbral del desarrollo es la falta de agua potable. Sin el
líquido elemento, ya puedes llevar internet, que no habrá gente para
conectarse. Es por eso que este proyecto es vital para Etiopía, donde una torre recolectora de agua costaría menos de 550$
(400 euros aprox.) y un pozo con bomba extractora 14,000$ (más de
10.000 euros). Ya no hay excusa para que estas comunidades puedan
desarrollarse. Tener agua potable, a partir de ahora, será más sencillo y
los niños, que son los encargados de ir a por agua, podrán estudiar y
jugar, que es lo que deben hacer.