La empresa nipona Kawasaki Heavy Industries fabricará las primeras
cisternas de gran capacidad para almacenar hidrógeno líquido, pensadas
para surtir a la futura industria de los llamados vehículos de pila de
combustible, que funcionan con este elemento.
Japón ya planea importar de Australia hidrógeno líquido a partir de 2017.
El Gobierno del país asiático ha decidido apostar por el hidrógeno
como fuente de energía limpia en el ámbito doméstico y especialmente
para la automoción con la creación de un plan marco para imponer su uso
generalizado en 2040.
Dos de los principales fabricantes de vehículos nacionales, Toyota y
Honda, están a punto de lanzar sus primeras berlinas alimentadas con
hidrógeno (las cuales emiten vapor de agua a la atmósfera en vez de
dióxido de carbono).
Al mismo tiempo la administración ha activado dos programas de ayudas
para subvencionar la compra de estos vehículos y la construcción por
todo el país de estaciones hidrogeneras para surtirlos.