1 jul 2020

Los 6 paradigmas de la energía para 2025

Los efectos del coronavirus han llevado a pensar que las energías renovables han ganado diez años. Sin embargo, cabe la posibilidad de una vuelta atrás. Con una regulación inmovilista, la caída de la demanda con mayor penetración de renovables ha producido el abaratamiento de los precios de la energía y una pérdida de rentabilidad de la generación centralizada, incluida la renovable.

La competitividad de la economía se juega en los próximos cinco años: o se innova en todos los usos de la energía o España se quedará atrás en la revolución energética de las renovables distribuidas en los tejados, con almacenamiento y aplicaciones inteligentes para la eficiencia de los edificios y la movilidad eléctrica. La gestión de la demanda se impone a la oferta de generación por la mayor competitividad de los recursos energéticos distribuidos. Lo importante ahora no es depender del mayor consumo sino del mayor ahorro de energía.

Los 6 nuevos paradigmas para los próximos cinco años

1 Una nueva mentalidad social a favor de la sostenibilidad y contra la contaminación
El coronavirus ha provocado la caída de la demanda energética. Las renovables han resistido mejor que las fuentes de energía tradicionales con récords de penetración superiores al 70% y por encima del 50% de media. La reducción de las emisiones y de la contaminación atmosférica, debida a las restricciones de movilidad, han asociado la crisis vírica a una próxima crisis climática y a la necesidad de avanzar en un uso de la energía más sostenible ambientalmente.

La ciudad en 15 minutos, la movilidad eléctrica, el autoconsumo, los edificios eficientes y limpios, comunidades de renovables o barrios inteligentes con energía solar, almacenamiento local e hidrógeno renovable local, representan otro modelo energético que multiplica sus iniciativas por dos hechos que están llegando a la conciencia colectiva: la imparable caída de costes de las pequeñas instalaciones renovables, más competitivas que las fuentes tradicionales, y la necesidad de multiplicar el uso de las energías renovables para que la temperatura del planeta no supere 1,5ºC en 2030.

La era del consumidor pasivo termina. El reto a corto plazo es integrar las energías renovables en los edificios, los hogares, el calor y el frío y en el transporte.

2 El progreso de las tecnologías de eficiencia energética y gestión de la demanda
La única fuente de generación que crecerá en 2020 son las energías renovables, incrementando la potencia instalada a un menor coste,

3 El almacenamiento en baterías desplaza al gas fósil

4 La carga inteligente del vehículo eléctrico para descarbonizar el transporte

5 La agregación y los agregadores independientes facilitarán la participación de los consumidores en el mercado eléctrico

6 Las comunidades ciudadanas de energías renovables

La mayor inversión en energías renovables no será eficiente ni tendrá sentido si no va acompañada de una estrategia para transformar el consumidor pasivo en consumidor activo. La transición energética depende de ello.

30 jun 2020

Hoy acaba el plan del humo

Siete centrales de carbón dejarán de operar hoy en España, al finalizar el período de vigencia del Plan Nacional Transitorio (PNT), un "plan-mecanismo de excepción" que utilizó el Gobierno Rajoy para permitir que las centrales de carbón pudiesen emitir hasta 15 veces más de lo que establecía como máximo la Directiva europea de Emisiones Industriales de 2010. 

El informe Last Gasp, publicado en 2018, estima que esas centrales fueron responsables de 349 muertes prematuras en 2016.

Según la plataforma Un Futuro Sin Carbón, integrada por las principales organizaciones ambientales de España y miembro de la alianza europea Europe Beyond Coal, el cierre hoy de las 7 centrales ha sido propiciado por lo que denomina "una mezcla de factores". A saber: las políticas medioambientales, la situación del mercado energético (con un precio del CO2 más alto y un precio del gas más bajo, entre otros factores); las propias decisiones empresariales; y el reclamo social de lucha contra el cambio climático, que habría presionado (la opinión pública) sobre los demás actores y que habría sido movilizada a su vez por las oenegés, que llevan ya mucho tiempo alertando de que el carbón no tiene cabida en la transición energética y advirtiendo de que hay que apostar por las fuentes renovables -que ya son plenamente rentables – como solución para un medio ambiente limpio, un medio ambiente seguramente lejos del propiciado por las autorizaciones ambientales integradas impulsadas por el Ejecutivo Rajoy, autorizaciones que han permitido emisiones que quintuplican, sextuplican y hasta multiplican por 15 (véase tabla aneja) las emisiones límite tipo fijadas por la UE en su Directiva de 2010.

LONGi da la réplica a sus competidores con el módulo de ultra alta potencia Hi-MO5 de 540 W

La compañía china LONGi, uno de los líderes mundiales en tecnología solar, ha publicado un "Documento Técnico" sobre su reciente lanzamiento, el Hi-MO 5, un módulo de ultra alta potencia diseñado para plantas a gran escala. 

Tiene una potencia frontal de hasta 540 vatios, una eficiencia superior al 21% y un tamaño de módulo de 2.256×1.133 milímetros. 

Las obleas de silicio estándar M10 (182 mm) dopadas con galio y la tecnología de "Soldadura Inteligente" ofrecen un alto rendimiento energético y fiabilidad a largo plazo.

El sector más contaminante de España, la quema de combustibles fósiles, reduce sus emisiones un 22% en 2019: Endesa disminuye un 46% gracias al parón del carbón

El sector de quema de combustibles disminuyó sus emisiones de CO2 un 22 por ciento entre 2018 y 2019, según el informe ‘Descarbonización 2020’ presentado este lunes por el Observatorio de la Sostenibilidad, que ha añadido que España redujo sus emisiones en el mercado de carbono un 13% en el último año, aunque con «fuertes diferencias entre empresas».


El informe recoge datos de la evolución de las emisiones de los mercados de emisiones, es decir, el energético, cementero, de aviación, de refino y químico a escala europea, española y por comunidades autónomas.

El informe ‘Descarbonización’ en España se lleva presentando desde 2012 y recoge los cambios en las emisiones de gases de efecto invernadero por sectores, instalaciones y por empresas sujetas al mercado de CO2.

En concreto, el estudio refleja que España ha disminuido sus emisiones entre 2019 y 2018 un 13 por ciento y que este porcentaje aumenta hasta el 27,6 por ciento en los últimos once años.

En Europa, los porcentajes de reducción fueron de un 23 por ciento en 2018 y un 10 por ciento en 2019. Además, la relación respecto al total de emisiones en 2019 fue de un 36 por ciento en 2019, y un 39 por ciento en 2018.

En España, los principales sectores contaminantes son la quema de combustibles (carbón, fuel y gas), que suponen casi la mitad del total de las emisiones del mercado de emisiones (48%); la producción de Clinker y cemento, 12 por ciento; refino y sector petróleo otro 12 por ciento; producción de arrabio o acero 6 por ciento; sector aeronaútico 5 por ciento; fabricación de cerámica 3 por ciento; Producción de productos químicos a granel 3 por ciento y 12 por ciento entre otros contaminantes.

Entre 2018 y 2019 los autores del informe han observado una disminución del 22 por ciento la quema de combustibles; un 7 por ciento la producción de clínker cemento; un 4 por ciento de refinerías y sector petróleo; un 8 por ciento la producción de arrabio o acero y 20 por ciento la producción de aluminio primario.

29 jun 2020

Ola verde contra Macron

Una ola verde ha inundado Francia con una espectacular subida del partido Europa Ecología Los Verdes (EELV), que ha superado las previsiones. Esta es la conclusión más evidente de la segunda vuelta de las elecciones municipales, que han confirmado, al mismo tiempo, el fracaso de las candidaturas del partido del presidente Emmanuel Macron, La República en Marcha (LREM). 

El tercer elemento destacado es la pavorosa abstención, del 59%, casi cuatro puntos por encima de la registrada en la primera vuelta, que ya fue un récord, al celebrarse el 15 de marzo, en pleno inicio de la pandemia. Con relación a las municipales de hace seis años, la abstención en esta segunda vuelta ha sido nada menos que 20 puntos mayor.

28 jun 2020

Gestiona tu propia energía

No puedes tener en casa una central nuclear ni quemar carbón en la cocina ni plantar un molino eólico en el balcón. Pero sí puedes tener una placa fotovoltaica, que convierte la luz del sol en energía eléctrica. Y desde que en la última década del siglo pasado, muy tímidamente, comenzase el autoconsumo eléctrico mediante estos artilugios, nunca ha parecido más realista el sueño de la independencia eléctrica.

¿Estamos entrando en la edad de oro de la energía solar fotovoltaica? La tecnología de las placas, que como tantas otras nació de la carrera espacial entre Estados Unidos y la Unión Soviética, es cada vez más eficiente, y su coste, menor: su base es el silicio, el segundo elemento químico más abundante en la corteza terrestre. El precio del panel fotovoltaico cayó un 89% entre 2007 y 2019, según datos de Anpier —la asociación de productores—, y la eficiencia de las placas —el porcentaje de luz solar que se convierte en electricidad— ha pasado del 6% de los primeros modelos a cerca del 20%. Mientras, se trabaja en materiales alternativos aún más eficientes, como el grafeno y la perovskita, un mineral.

Paralelamente, y gracias en parte al desarrollo del coche eléctrico, mejora también el funcionamiento y el precio de las baterías de almacenaje, que permiten consumir de noche lo que se produce de día. Estos aparatos están mutando de simples despensas a máquinas inteligentes, dotadas de tecnología cada vez más sofisticada. La alianza de ciencia y software parece estar acercando el sueño de la autogestión energética: mi casa, mi castillo, mi energía.

A partir de estos datos, Blanca Perea, experta en energía y directora ejecutiva senior de FTI Consulting, concluye: “El autoconsumo eléctrico tiene hoy más significado social, y hasta político, que medioambiental”. En su opinión, “existe el riesgo de potenciar el autoconsumo, porque resulta más sexy, antes que la eficiencia. Pero uno debe instalar luces led, revisar la antigüedad de sus electrodomésticos y mejorar sus hábitos de consumo antes de lanzarse a poner placas fotovoltaicas”.

Coinciden políticos, analistas del sector eléctrico y ecologistas, es clave el desarrollo del autoconsumo colectivo: la unión de varios consumidores para compartir la propiedad y el uso de instalaciones de generación fotovoltaica, ya sea en una gran urbanización, en un polígono industrial o incluso en varias manzanas de viviendas. Lo explica Perea: “Lo importante no es tener muchas placas, sino la eficiencia energética, casar la oferta con la demanda”. Y para lograrlo, “hay que buscar enfoques más centrados en la gobernanza energética en barrios y comunidades con el perímetro suficiente”.

27 jun 2020

Holaluz quiere transformar el tejado de tu casa en productor de energía

Holaluz pone en marcha la Revolución de los Tejados. La comercializadora quiere convertir todos los terrados de España en generadores de energía eléctrica con la instalación de paneles solares de forma gratuita. Sin necesidad de que los usuarios tengan que invertir ni un euro, la eléctrica ofrece un ahorro mensual en la factura del entorno al 20% a quienes habiliten la parte superior de sus edificios o casas para instalar placas solares que inyecten energía limpia en la red.

No se trata de una propuesta de autoconsumo (producción de electricidad para el consumo propio), sino de aumentar la capacidad renovable de la red utilizando espacios infrautilizados como son los tejados. Es decir, opta por instalar en estas zonas placas fotovoltaicas en vez de hacerlo en grandes espacios, como ocurre con las grandes instalaciones renovables y que suponen en la mayoría de los casos la compra de un terreno. En este caso, se trataría de una especie de cesión momentánea de un espacio inutilizado a cambio de una rebaja en el recibo de los usuarios.

Ellos se encargan de costear y montar la instalación y los clientes que, por ejemplo, pagan 100 euros al mes por su electricidad pasarán a pagar alrededor de un 20% menos, 80 euros (el porcentaje de ahorro varía en función de la capacidad de producción), durante 15 años, sin obligación de permanencia.