¿Cómo es esto posible?
Su propietario, un arquitecto, la ideó según un estándar de diseño desarrollado en Alemania a principios de 1990, conocido como "Passivhaus" o "Casa pasiva"
La vivienda se orienta de tal manera que las ventanas y los paneles solares colocados en el techo reciben una cantidad óptima de luz solar.
Los paneles solares aportan energía a toda la casa.
"Tras
dos años de ocupación continua, la energía total utilizada ha sido de
3.453 kilovatios-hora al año, lo cual queda casi completamente cubierto
por la energía generada a través de los paneles solares del techo".
Además, la vivienda cuenta con ventanas con tres hojas de vidrio para
lograr un mayor aislamiento y utiliza luces LED, que consumen mucha
menos energía.
La calefacción funciona a través de una bomba de calor que captura el aire caliente del exterior.
Al mismo tiempo, proporciona agua caliente para los grifos de la casa.
La construcción, que costó US$360.000, ha ganado un premio de eficiencia energética en Reino Unido.