Nacería con un capital inicial próximo a los 300 millones de euros y pediría prestado al Banco Europeo de Inversiones (BEI)
El objetivo es que el banco haga préstamos finalistas con una intención muy
concreta: poner paneles solares en las cubiertas de los bloques de
edificios.
Con esta medida se lograrían dos resultados: ganar en
eficiencia e independencia energética y revitalizar un sector atrayendo
empleo de la construcción.
El préstamo, eso sí, se daría a la comunidad
de vecinos por lo que el bloque se debería poner de acuerdo y se
devolvería en seis u ocho años.