28 may 2020

La fiebre renovable se mantiene durante el estado de alarma: las solicitudes de acceso se incrementan en abril y se acerca a los 270 GW

Los datos de acceso y conexión que ofrece Red Eléctrica siguen aumentando mes a mes, incluso si España se encuentra en estado de alarma por la pandemia. La paralización de la actividad económica, con precios muy bajos de la electricidad, invitaban a que el apetito de los inversores en renovables se frenase, pero la fiebre por hacerse por un punto de conexión no conoce límites.

Este mes de abril más de 6.000 MW de renovables han solicitado permiso de acceso y conexión. Esto hace que ya sean cerca de 270 GW la nueva potencia que ha solicitado permiso, casi tres veces la capacidad actual del sistema eléctrico español.

En total, ya tienen el permiso concedido unos 115,4 GW de nuevas renovables, de los cuales 88,4 GW son de fotovoltaica y 27 GW de eólica.

«Durante el mes de abril, a pesar del estado de alarma, se han seguido recibiendo solicitudes de acceso a un ritmo incluso superior al de meses anteriores. Este incremento se ha visto acompañado también de un aumento de los contingentes contestados con permiso de acceso y denegados. Además, las solicitudes afectan cada vez más a puntos de la red considerados hasta hace poco de escaso interés (nudos próximos o en los mismos núcleos urbanos, elementos de red que no son subestaciones de la red de transporte o subestaciones en Comunidades Autónomas que habían tenido menor actividad renovable)», afirman fuentes de REE.

27 may 2020

El plan de recuperación económica será de 750.000 millones, medio billón a fondo perdido con España como uno de los grandes beneficiados

La Comisión Europea propone un plan de recuperación que alcanzaría los 750.000 millones en dos años y que será canalizado a los gobiernos principalmente a través de transferencias directas (500.000 millones) pero que también incluiría una parte de préstamos (250.000 millones).

El comisario de Economía, Paolo Gentiloni ha avanzado la cifra total del fondo en la red social Twitter, donde ha destacado que se trata de un «punto de inflexión europeo para enfrentarse a una crisis sin precedentes».

Fuentes comunitarias han confirmado a Europa Press que la mayoría del plan sería transferido a los Estados miembros en forma de subsidios (500.000 millones), mientras que el resto (250.000 millones) tomaría la forma de préstamos a devolver.

Según la agencia Reuters, de un total de 750.000 millones de euros que la Comisión tomará prestados para el fondo de recuperación, Italia obtendrá 173.000 millones, de los cuales 82.000 millones serían subvenciones y 91.000 millones serían préstamos.

España podría obtener un total de 140.000 millones, de los cuales 77.000 millones serían subvenciones y 63.000 millones de préstamos.

Se trata de las características básicas del fondo de reconstrucción que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, presentará este miércoles en el Parlamento Europeo, junto con su borrador de presupuesto comunitario para el periodo 2021-2027, que tendría una dotación total para siete años de aproximadamente un billón de euros.

Se trata, sin embargo, de una propuesta de Bruselas que ahora debe ser discutida por los jefes de Estado y de Gobierno y acordada con el Parlamento Europeo, por lo que las cifras podrían cambiar en el acuerdo final para el plan de reconstrucción.

26 may 2020

“Necesitamos movilizar liderazgos políticos, inversiones responsables y sociedades comprometidas en la recuperación"

Teresa Ribera
Se trata de aunar esfuerzos en todos los ámbitos. Necesitamos movilizar liderazgos políticos, inversiones responsables y sociedades comprometidas en la recuperación inteligente, justa y capaz de activar las palancas que nos permitan recuperar el ritmo de nuestra economía, de nuestro empleo y de nuestra sociedad. Es cierto que no partimos de cero: la Unión Europea lleva tiempo apostando fuertemente por la lucha contra el cambio climático y la sostenibilidad pero ha llegado el momento de consolidar esta apuesta con el Pacto Verde Europeo. Es precisamente lo que buscamos. A partir de ahora trabajaremos juntos apoyando y poniendo en práctica unos planes de recuperación e inversión que actúen como aceleradores de la transición hacia la neutralidad climática y los ecosistemas saludables poniendo en centro a las personas, como siempre ha debido ser.


Por parte de España, el Gobierno entendió desde el primer día la trascendencia que tiene esta agenda, desde el punto de vista de la modernización económica, de la incidencia social, de la mejora de calidad de vida de nuestros ciudadanos y nuestro medio ambiente. Por tanto, forma parte de sus prioridades a la hora de plantear una reconstrucción del país y así lo haremos. Es lo que defendemos en Europa: cualquier programa en la Unión debe conciliar la capacidad de recuperarnos de esta gran sacudida con el mantenimiento y la apuesta por un acuerdo verde.

En este contexto, desde el Ministerio vamos a trabajar para que no se dé paso atrás en ambición y no se relajen las normas ambientales. Trabajaremos en todos los frentes.

Economistas de Oxford han realizado una clasificación de la capacidad de producción ecológica de cada país del mundo y han visto que España es uno de los países con mayor potencial para beneficiarse de una economía verde.

Entre otros efectos, se crearán entre 250.000 y 350.000 empleos netos anuales de aquí a 2030. Sólo las inversiones en renovables generarían entre 107.000 y 135.000 empleos netos al año en 2030; las dedicadas al ahorro y eficiencia energética, entre 56.000 y 100.000 puestos de trabajo; y las de redes y electrificación de la economía, unos 46.000.

España escala al puesto 11 de los países más atractivos para la inversión en renovables

España ha escalado cuatro posiciones en la clasificación mundial de los países más atractivos para la inversión en renovables, hasta el puesto número 11, debido a la apuesta del Gobierno por la política climática y energética como una de sus prioridades.

Según el último informe ‘Renewable Energy Country Attractiveness Index (Recai)’, elaborado por la firma de servicios profesionales EY, España sobresale «como uno de los países más atractivos y con mayor proyección de crecimiento en materia de energías renovables».

La mayoría de los inversores son optimistas con respecto a los proyectos del sector a medio plazo en el país, toda vez que el Gobierno está estableciendo planes para aumentar la producción de energía eólica y solar.

«España destaca por su apuesta por las energías alternativas, con un fuerte crecimiento tanto en energía eólica como en solar el año pasado. Este esfuerzo inversor ha determinado que sea el mercado de Europa más importante, desde 2008, en materia de capacidad de energía solar» destaca el socio responsable del sector de Energía de EY, Víctor M. Pérez.

El estudio también revela que el cambio climático, unido a los criterios ambientales, sociales y de buen gobierno corporativo, cada vez son más estratégicos para las compañías, influyendo en su valor en el mercado, por lo que los inversores institucionales no solo valoran la rentabilidad de las empresas, sino también su contribución a la sociedad.

En el caso de España, el Gobierno presentó a la Comisión Europea su Plan Nacional de Energía y Clima (Pniec), que establece el objetivo de un recorte del 23% en las emisiones para 2030, en comparación con los niveles de 1990.

Este plan anticipa un aumento en la energía eólica de 28 GW en 2020, a 40 GW en 2025 y 50 GW en 2030, así como en solar fotovoltaica, que pasará de 8.4 GW a principios de este año, a 22 GW en 2025 y 39 GW en 2030.

Las 12 mayores petroleras del mundo, Repsol entre ellas, se comprometen a acelerar su reducción de emisiones

Las 12 empresas petroleras que conforman la Iniciativa Climática de Petróleo y Gas, entre las que se encuentra Repsol, han firmado una carta abierta en la que se han comprometido a acelerar los esfuerzos de reducción de emisiones dentro de sus propias empresas.

El documento, firmado por los consejeros delegados de las petroleras, recoge el compromiso por parte de las firmas de «ayudar al mundo a recuperarse del ‘shock’ económico que esta crisis supone».

Así, no solamente afirman que acelerarán sus esfuerzos de reducción de emisiones mediante la reducción de emisiones de metano, sino también que seguirán apoyando el «desarrollo, la implementación y crecimiento de soluciones innovadores bajas en carbono» dentro de la industria del petróleo y el gas.

Por otro lado, las empresas pertenecientes a la Iniciativa han subrayado que seguirán avanzando en el «escalado» de la captura, uso y almacenamiento de carbono comercialmente viable. Al tiempo, se han comprometido a apoyar a los diferentes gobiernos de los países en los que están radicadas sus empresas en el «diseño de políticas eficientes que puedan acelerar las transiciones energéticas», aunque han vinculado esta medida a que esas medidas también estimulen el crecimiento económico.

En la misiva también se subraya que, a pesar de «la preocupación» que puede existir por el hecho de que el contexto económico por la pandemia mundial pueda «empujar» a las compañías de petróleo y gas «y a los gobiernos de todo el mundo» a retrasar la acción climática, «la realidad es que, en lugar de cambiar nuestras prioridades, la crisis del Covid-19 está cristalizando aún más en su enfoque en lo que es esencial».

«Salud, seguridad y protección del medio ambiente, al tiempo que proporcionar la energía y los productos vitales que la sociedad necesita para apoyar la recuperación económica», añade.

En este sentido, la OGCI, de la que, junto a Repsol, forman parte empresas del sector como BP, Chevron, ENI, CNPC, Equinor, ExxonMobil, Pemex, Petrobras, Total, Occidental, Saudi Aramco o Shell, indica que el desafío «sin precedentes» al que se enfrenta el mundo por el Covid-19 obliga a impulsar el «enfoque en lo que realmente importa».

La espectacular demolición de las ocho torres de la central de Hazelwood, una de las plantas de carbón más contaminantes del mundo


22 may 2020

Infinity Blue redobla su apuesta por el hidrógeno verde en Australia

El estado australiano de Nueva Gales del Sur podría pasar de un sistema eléctrico basado en combustibles fósiles a otro de hidrógeno verde para 2027 con la construcción de un proyecto de eólica, solar e hidrógeno verde de 1.000 MW. La iniciativa es de Infinity Blue Energy (IBE) y en el proyecto se invertirán 2.700 millones de dólares.

El proyecto NEO, que así se llama, se iniciará con un estudio de viabilidad y un diseño detallado durante los próximos 18 meses, enfocándose en la transición de un sistema dependiente de la electricidad alimentada con carbón y gas a otro sistema eléctrico de carga base generada por hidrógeno verde.

«La visión en Infinite Blue Energy (IBE) es mostrarle al mundo, ante todo, que Australia tiene la tecnología, las habilidades y la mentalidad empresarial para ser un verdadero líder en el desarrollo de plantas de hidrógeno verde», dijo el CEO de IBE, Stephen Gauld.

IBE está negociando pasar más de 1.000MW de electricidad generada actualmente por carbón y gas natural a una fuente de electricidad de carga de hidrógeno verde. «Actualmente estamos en negociaciones con los principales usuarios de la Región Hunter de Nueva Gales del Sur que han confirmado sus intenciones de hacer la transición a la electricidad de carga de hidrógeno verde en esta década».

Infinite Blue Energy buscará diseñar y desarrollar un proyecto que utilizaría proyectos solares y eólicos a gran escala para producir electricidad y almacenar hidrógeno que podría suministrarse directamente a los usuarios industriales, o volver a convertirse en electricidad durante los períodos de bajo viento y poco sol.