La inversión alcanzó la cota histórica de 329.000 millones de dólares,
mientras que la nueva capacidad solar y eólica sumó 121 GW, un 30% más
que en 2014.
Michael Liebreich, presidente de la junta asesora de
Bloomberg New Energy Finance, dijo: “Estas cifras son una réplica
impresionante a todos los que esperaban que la inversión en energías
limpias se iba a detener por el descenso de los precios del petróleo y
del gas. Y hay que destacar que la mejora de los costes y de la
competitividad de la energía solar y de la eólica, impulsada en parte
por el cambio al sistema de subastas de nueva capacidad en lugar del uso
de tarifas ventajosas, ha supuesto un cambio que ha sometido a los
productores a una continua presión sobre los precios.
“La eólica y la energía solar ahora se están adoptando en muchos países
en desarrollo como una parte natural y sustancial del mix de generación:
se puede producir electricidad a precios a menudo más baratos que los
del mercado mayorista de electricidad; estas energías reducen la
exposición de un país a los precios futuros esperados de los
combustibles fósiles y, sobre todo, se pueden construir muy rápidamente
para satisfacer la demanda de electricidad. Y es muy difícil ver que
estas tendencias se vayan a revertir a la luz del Acuerdo Climático de París de diciembre”.