La empresa yeclana Graphenano presentó este jueves, junto a su socio
chino Chint, unas baterías de polímero de grafeno para diversos usos
que, en el caso del vehículo eléctrico, permite una autonomía de 800
kilómetros, ocupa entre un 20 y un 30% menos que una de litio y se
podría llegar a cargar en 5 minutos.
La batería se va a fabricar en Yecla (Murcia) a partir de marzo, tiene una
densidad de 1.000 vatios hora por kilogramo, un voltaje de 2,3 voltios y
cuando fue analizada por los organismos independientes TÜV y Dekra no
explotó, como puede suceder con una batería de litio. Además, tras ser
cortocircuitada volvió a funcionar con un 60 % de la carga, según
Martínez.
Según el presidente, tiene un potencial "enorme", ya que la velocidad de
carga y descarga es de 100 C, mientras que la de una de litio es de 3C,
y no tiene efecto memoria.
En el caso de un coche utilitario el peso de esa batería no llegaría a los 100 kilos.
El directivo resaltó que la batería de grafeno es modulable, por lo que
están trabajando con varios fabricantes de vehículos -no ha dado
nombres- y de aviones, como Airbus, para que puedan adaptarla a sus
productos y fijar la autonomía y la capacidad de carga y recarga que
quieren.
Del precio, que eludió dar, señaló que es similar al de una batería de
litio, porque lo que interesa es que sea rentable y se pueda
comercializar para que suponga la "tercera revolución industrial". Su
vida útil es 4 veces superior a la de una de litio y la carga puede ser
inductiva.
Posibilitará emplear a 7.000 personas y que, en 2019, se alcance un pico
de facturación de entre 3.000 y 4.000 millones de euros.