Europa se está quedando a la cola en el mercado de las baterías de vehículos eléctricos. Tanto es así, que hasta se han dado cuenta en Bruselas. La Comisión Europea, con el vicepresidente energético Maros Sefcovic a la cabeza, ha lanzado la que se denomina la Alianza de las baterías de la UE.
Se trata de un acuerdo que ha alcanzado la industria de las baterías en Europa para unir sus fuerzas y poder competir de tú a tú con los grandes fabricantes de baterías del mundo que se encuentran en Asia (Japón, Corea del Sur y China) y también en EEUU.
“La falta de una base doméstica europea de fabricación de células pone en peligro la posición de los clientes industriales de la UE debido a la seguridad de la cadena de suministro, al aumento de los costes debido al transporte, a los retrasos en el tiempo, por lo tanto, tenemos que actuar rápidamente – y colectivamente – para superar esta desventaja competitiva y capitalizar nuestro liderazgo en muchos sectores de la cadena de valor de la batería, desde los materiales a la integración del sistema y el reciclaje”, dijo el vicepesidente en una reunión con los fabricantes.