El centro de la ciudad inglesa de Oxford busca convertirse en 2035 en la primera zona urbana del mundo sin vehículos que usen diésel o gasolina y solo permita unidades eléctricas o híbridas.
La medida se suma a la decisión que tomó el gobierno de Reino Unido el pasado julio de prohibir la venta de vehículos que empleen diésel o gasolina a partir de 2040.
La propuesta señala que la primera etapa se aplicará en 2020 y se ampliará a más calles y avenidas del centro de Oxford en 2025 y 2030.
Se prevén inversiones para apoyar la transición de taxis y autobuses de pasajeros, así como para nuevas cámaras de vigilancia que multen de manera automática a quienes violen la norma con hasta 60 libras.