Estos días se celebraba la reunión de accionistas de Tesla y Elon Musk se ha sacado un as de la manga: Tesla será capaz de fabricar baterías iones de litio por menos de 100 $/kWh. Eso es menos de la mitad del precio que se estimaba en enero de este año y justo en el límite para hacer competitivo el coche eléctrico. Si es cierto, Tesla está años por delante de lo que imaginaban los expertos.
Eso ha hecho que las acciones de la compañía se disparen, pero el anuncio va mucho más allá: el límite de los 100 euros ha sido durante años el “número mágico” de toda la industria de las baterías. Con baterías a este precio, comprar un coche eléctrico será más rentable que uno convencional.
Según las estimaciones de Bloomberg, el precio iría bajando hasta llegar a los 100 $/kWh en 2025. Para otros analistas como Sam Korus, el “número mágico” estaba más cerca, a un par de años vista. Pero Elon Musk acaba de destrozar todas las previsiones.
Las baterías a este precio cambiarían el escenario mundial de raíz. Si Elon Musk dice la verdad, los coches convencionales estarán fuera del mercado a principios de la próxima década.