El futuro del autoconsumo energético parece estar más cerca que nunca en España y Europa, y la Generalitat de Cataluña ha puesto en marcha un interesante proyecto llamado ioCAT.
Una de las peculiaridades de esta iniciativa que impulsará este tipo de implantaciones será el uso de un blockchain o cadena de bloques derivado del de la criptodivisa Ethereum. La idea es crear tokens que incentiven a los productores para que luego esa energía excendente se redistribuya a toda la red y los consumidores paguen con los tokens creados por este singular proyecto.
En La Vanguardia explican cómo la cadena de bloques permitirá la gestión y facturación de esa energía producida a través de la instalación de paneles solares y consumida por los miembros de una comunidad de usuarios.
Además, explica Lluïsa Marsal, promotora del proyecto, con esta tecnología se abonarán recompensas en forma de los tokens generados con este proyecto, que se irán distribuyendo conforme a ese consumo y producción. Los usuarios contarán con un monedero virtual en el que podrán gestionar esos tokens, transferirlos o recibirlos de acuerdo a su propio uso y producción de esas energías renovables.