La demanda de energía mundial ha ido creciendo conforme al progreso tecnológico y la población humana, ya por encima de los 8.000 millones de almas. Desde bien temprano empezamos a utilizar energías fósiles -carbón- para nuestras necesidades energéticas, aunque durante la mayor parte de la Historia fuimos más de energías renovables: biomasa (madera), eólica (para barcos y molinos), solar (invernaderos), animal/muscular, etc.
Hoy día colmamos la mayoría de nuestras necesidades con energías fósiles, entiéndase a nivel global. Técnicamente hablando son renovables si consideramos aceptable esperar decenas de millones de años para la formación de más carbón, más gas y más petróleo. A la pregunta de «¿Podemos depender exclusivamente de energías renovables?» la respuesta breve es unívoca: sí. Ahora pasemos a la versión explicada.
Solo con energía solar y eólica hay un potencial de generación de 6.700 petavatios hora, o lo que es lo mismo, 6.700 millones de gigavatios hora. Las necesidades de producción eléctrica de la actualidad están en el término medio, 6,7 PWh, es decir, 100 veces menos. Si quisiésemos generar 6,7 PWh exclusivamente con energía solar fotovoltaica habría que sembrar placas solares en 450.000 kilómetros cuadrados, según Carbon Tracker Iniciative. Eso es el 0,3% de la superficie del planeta.