La UdL acaba de anunciar que pondrá en marcha instalaciones solares fotovoltaicas (FV) para autoconsumo en todos los nuevos edificios que construya. De momento, su Unidad de Infraestructuras ya ha previsto la ejecución de autoconsumos FV en el nuevo edificio polivalente del campus de Cappont (foto), en la cubierta de la pista polideportiva del mismo campus y en el inmueble que acogerá los estudios vinculados a Enfermería, en el campus de Igualada. Según fuentes de la UdL, las instalaciones tendrán "toda la potencia posible". La Universitat puso en marcha el año pasado su primera instalación de autoconsumo, 82,62 kilovatios de potencia.
El autoconsumo de la UdL, que en su momento fue inscrito en el registro ministerial (ahora ya no es necesario), vierte sus excedentes a la red. La instalación tiene derecho a ser retribuida por ello (está inscrita así), pero, tras más de un año de tramitación, aún no ha cobrado ni un solo kilovatio hora de los vertidos, según Vallejo. El jefe de la Unidad de Infraestructuras de la UdL, uno de los impulsores del plan fotovoltaico de la UdL en 2008, tiene en todo caso claro el horizonte: “la idea es seguir instalando autoconsumos en todos los edificios nuevos de la Universidad. Para ello –añade-, lo idóneo es que sean diseñados desde el principio con ese horizonte; lo ideal es que el autoconsumo venga de serie, como de serie viene en cualquier edificio nuevo la instalación de la calefacción, por ejemplo”.
Por lo demás, y, “en el marco de esta política de potenciar la sostenibilidad –informa la UdL-, desde principios de año, toda la electricidad que consume la UdL tiene garantía 100% renovable gracias a la compra conjunta coordinada por el Consorcio de Servicios Universitarios de Cataluña, en la que también participan otras 32 instituciones de docencia e investigación y a la que el Instituto Català de la Salut se ha aderido posteriormente”. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia expide las acreditaciones que aseguran que la energía proviene de fuentes renovables. Endesa Energía es la adjudicataria de la alta tensión y Aura Energia, de la baja.