La multinacional energética Repsol planea hibridar con energías renovables la central de ciclo combinado de Escatrón (la antigua térmica inaugurada en 1953) con el fin de preparar el desembarco de un centro de datos que se nutra de la energía producida en las instalaciones. La petrolera, que adquirió la central en 2018 a la compañía eléctrica española Viesgo junto a una importante cartera de suelos, pretende ofrecer un mix de suministro sostenible y barato procedente de la fotovoltaica y la eólica junto al más seguro e ininterrumpido del ciclo combinado al mercado de los almacenes de la nube, tan pujante en los últimos tiempos que ha desatado una auténtica guerra por los enchufes al sistema de grandes consumidores de Red Eléctrica en Aragón.
Según ha podido confirmar este diario de distintas fuentes conocedoras de la operación, lo que queire hacer Repsol es preparar el terreno para la llegada de un futuro operador de 'data centers', ofreciéndole suelo y energía a un precio competitivo con una conexión como gran consumidor asegurada. Tampoco tendrían problema para la toma de agua, dada la proximidad del río Ebro a los municipios de la Ribera Baja, lo que sería una suerte de proyecto llave en mano, a falta de la construcción de la nave y la instalación de los equipos.