La reducción de costes de las tecnologías renovables y la lucha contra
el cambio climático hacen que el argumento económico resulte cada vez
más convincente para huir de de la inversión en combustibles fósiles,
según un informe de Arabella Advisors.
De hecho, los análisis
financieros más recientes de HSBC, Citigroup, Mercer, el Banco de
Inglaterra y la Agencia Internacional de Energía, indican un riesgo
cuantificable significativo a las carteras expuestas a este tipo de
activos.
Este asunto está en la agenda de los gobiernos y los inversores de 43 países.