El motor está formado, por una batería, dos motores eléctricos y un motor de gasolina.
De los dos motores eléctricos, hay uno de 111 kW (150 CV) que se utiliza para impulsar las ruedas («impulsor») y otro de 55 kW (75 CV) que puede usarse para generar electricidad («generador») y también para impulsar al coche.
En ocasiones se utilizan los dos motores eléctricos a la vez para impulsar el coche, para mejorar la eficiencia y hacer que giren a inferiores revoluciones, pero nunca para superar los 150 CV.
El motor de combustión es un 1,4 l y tiene 86 CV de potencia (más información técnica del sistema de propulsión del Ampera).