Hoy se habla de Alemania y de un nuevo informe de Agora Energiewende -el think tank
alemán que se ocupa de la transición energética– según el cual el país
podría cuadruplicar la potencia fotovoltaica, si se agrega en el sistema
eléctrico cantidades adecuadas de almacenamiento. El aspecto importante
es que ello no daría lugar a ningún tipo de problemas en la red, sino
que, por el contrario, sería mucho menos costosa en comparación con las
inversiones adicionales que se están realizando en nuevas líneas de alta
tensión.
El director afirma en el estudio que la
política energética de Alemania debería ajustarse de manera que se diera
una mejor acogida al almacenamiento de energía solar, en lugar de
seguir la estrategia actual de construir más líneas de alta tensión más
allá de 2025.
El Banco Alemán de Desarrollo KfW reveló en septiembre que el régimen
alemán de ayudas al almacenamiento ha impulsado un crecimiento del 35%
en los proyectos de almacenamiento de energía solar, ayudados
por la caída de los costes del sistema y el crecimiento de autoconsumo
para un creciente número de propietarios de instalaciones solares en
Alemania.