La nueva estación de carga para vehículos
eléctricos, presentada ayer en Zaragoza, integra generación eléctrica
renovable y almacenamiento de energía, lo que podría marcar las pautas
de las futuras “electrolineras” en todo el mundo. Este trabajo forma
parte del proyecto nacional Sirve –Sistema Integrado
para la Recarga de Vehículo Eléctrico–, financiado por el Ministerio de
Economía y Competitividad, para contribuir al despliegue del vehículo
eléctrico.
El sistema está formado por baterías de litio
con una capacidad de 20 kWh, y potencia de 20 kVA, que permite
compensar potencia activa y reactiva. De este modo la estación reduce el
impacto que los vehículos eléctricos podrían causar sobre la red
eléctrica, actuando como sistema estabilizador, algo que hasta ahora no
se había conseguido aunar en una instalación de este tipo.
Su propia estructura integra una instalación
fotovoltaica que suministra a las baterías energía renovable siempre que
sea posible, minimizando el consumo de la red.