Hace unos días, el Gobierno publicaba el Real Decreto Ley 15/2018 con una serie de medidas urgentes sobre el precio de la electricidad. Una de las más destacadas ha sido el reconocimiento del autoconsumo compartido como un derecho de los consumidores. La aprobación de esta nueva normativa es un gran avance para los usuarios que prefieren optar por esta modalidad de abastecimiento de energía.
¿Cuáles son las ventajas de esta nueva medida?
En primer lugar, esta iniciativa supondrá una reducción de los costes de instalación de las placas fotovoltaicas, cuyo precio medio rondaba actualmente los 800 euros. Asimismo, esta nueva medida implicará una mayor rapidez y sencillez a la hora de realizar los procedimientos necesarios para la legalización de las instalaciones.
Por último, la energía autoconsumida estará exenta de todo tipo de cargos y peajes, pudiéndose establecer mecanismos de compensación para los excedentes que se viertan a la red. Ahora bien, estos excedentes sí que estarán sometidos al mismo tratamiento que la energía producida por el resto de las instalaciones de producción. Aun así, esta exención conllevará una reducción de los periodos de amortización, pasando de los actuales 15-18 años a los 8-10 años, y ayudará a que el autoconsumo pueda considerarse realmente un sistema de ahorro.
En definitiva, la aprobación de estas medidas, la simplificación de los trámites y el reconocimiento del derecho al autoconsumo compartido son un gran impulso para la producción de energía. Esta condición ayudará a equipar a los consumidores españoles con los del resto de Europa, garantizándoles así el acceso a una alternativa energética más barata y respetuosa con el medio ambiente.