Ya queda menos para que el Gobierno de Pedro Sánchez cumpla su promesa de eliminar el ‘impuesto al sol’. Hace más de un mes que la ministra de Transición Energética, Teresa Ribera, anunció que lo haría antes de que acabara el año mediante un anteproyecto de ley.
Con la derogación del peaje de respaldo y simplificando los trámites en su instalación se abrirá el esperado camino hacia el desarrollo del autoconsumo fotovoltaico, algo que ha ocurrido y con mucho éxito en los países de nuestro entorno.
Pero no solo el sector renovable está a la expectativa de ese momento. También el de las grandes superficies, el comercio online e incluso las asociaciones de consumidores lo ven como un nicho de mercado con grandes posibilidades.
IKEA es uno de los grandes interesados. Según fuentes de la compañía, están preparados para que “una vez se hagan efectivos los cambios que se prevén en la regulación sobre el autoconsumo y el impuesto a las instalaciones solares, IKEA en España venderá los kits que ya se han empezado a comercializar en otros países”.