Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) han acordado usar el potencial renovable de la Península Ibérica para garantizar el suministro energético.
La decisión figura en las conclusiones de la Cumbre de líderes de la UE de este martes y es una de las medidas aprobadas para reducir la alta dependencia de combustibles fósiles de Moscú.
Así, los jefes de Estado y de Gobierno han pactado mejorar las infraestructuras interconexión de gas y electricidad europeas invirtiendo en proyectos nuevos y proyectos por completar, "incluyendo el gas natural licuado (GNL) e interconexiones de electricidad y de gas preparadas para hidrógeno", incluyendo los Estados miembro insulares, recoge Europa Press.
A este respecto, el presidente del Gobierno Pedro Sánchez ha defendido que la Unión Europea debería financiar esas interconexiones porque han sido "los contribuyentes españoles" los que han financiado en las últimas décadas la capacidad de regasificación de la Península Ibérica, que podría suponer un punto de inflexión para alcanzar la independencia energética comunitaria.
España llevó a la cumbre europea la necesidad de que la UE aprovechara los fondos de Repower EU —la nueva estrategia para diversificar sus fuentes de energía y reducir la dependencia de Rusia—, para acelerar las interconexiones energéticas con la Península Ibérica y los plazos de ejecución.
Entre las prioridades para España, según fuentes de Moncloa, se mantiene el interés por la interconexión eléctrica con Francia así como el corredor de hidrógeno pirenaico o su posible alternativa a través del Mediterráneo, en ambos casos con el apoyo de fondos europeos.
Estas conclusiones del acuerdo se incluyen dentro del pacto alcanzando entre los Veintisiete de impulsar la penetración de renovables en el mix energético europeo, un compromiso para el que los líderes han abogado por la aceleración de los permisos de concesión para este tipo de proyectos, en línea con la propuesta planteada en el plan Repower EU. (+)