The Guardian informa de que la iniciativa respaldada por el Gobierno, el Intercambio Energético Distribuido, permitirá que los propietarios domésticos y los negocios alquilen su capacidad de generación y almacenaje solar. Y para que los hardware particulares puedan ofrecer sus capacidades de almacenamiento disponibles se les ofrecerá un pequeño dispositivo que atesore la energía que sobre en otro punto de la red.
Este es, en esencia, el mismo concepto de las plantas energéticas virtuales, que emplean software y almacenaje de baterías para combinar pequeños paneles solares individuales como una gran fuente única. Varios ensayos de plantas energéticas virtuales ya se han llevado a cabo en Alemania y Estados Unidos, pero hasta ahora no se ha producido ningún despliegue amplio de la tecnología.