La catedrática de Economía Natalia Fabra, miembro de Economistas frente a la Crisis, ha utilizado la aplicación Energeia Simula para averiguar qué pasaría con el precio de la electricidad si cerrasen todas las centrales térmicas de carbón (Energeia Simula es una aplicación que ha sido desarrollada y es regularmente empleada por un equipo de investigadores del Departamento de Economía de la Universidad Carlos III de Madrid, UC3M).
Pues bien, la simulación revela que el precio de la electricidad no solo no subiría ni mucho menos un 15%, tal y como ha anunciado el ministro de Energía (y también economista) Álvaro Nadal, sino que, antes al contrario, si España clausura el carbón pero incrementa su potencia renovable -lo que va a suceder tras los 8.000 megavatios subastados- bajará el precio de la luz.
Si se hace el análisis directamente sin tomar ninguna otra medida, apenas cambian los precios con la evolución actual:
"El cierre de las centrales de carbón en España hubiera hecho aumentar los precios en el mercado mayorista de electricidad entre un 3.3% y un 3.6% desde enero hasta octubre de 2017, y entre 5.9% y un 8.9% en 2016."
Pero en una segunda hipótesis de calculo, que es de si se hubiera sustituido la capacidad eliminada por renovable:
"La sustitución de las centrales de carbón por renovables hubiera contribuido a una reducción de emisiones del 60% en 2017 y del 64% en 2016 frente al status quo. Los costes de la generación eléctrica hubieran caído en un 17% en 2017 y en un 14% en 2016 por la sustitución del uso de combustibles fósiles por fuentes renovables".