Un nuevo informe de BloombergNEF (BNEF) publicado hoy prevé que, con el apoyo político adecuado, los costes del hidrógeno obtenido con fuentes renovables irán cayendo de forma mucho más acusada de lo que había estimado anteriormente, hasta el punto de que para 2050 su coste será un 85% menor que ahora y estará por debajo de lo que costará obtener hidrógeno con gas natural (hidrógeno azul).
El abaratamiento de la solar fotovoltaica es la gran impulsora del descenso. "Ahora pensamos que la electricidad fotovoltaica será un 40% más barata en 2050 de lo que pensábamos hace sólo dos años, gracias a una fabricación más automática, un menor consumo de silicio y plata, una mayor eficiencia fotovoltaica de las células solares y un mayor rendimiento de los paneles bifaciales", señalan desde la consultora.
Estos costes tan bajaos del H2 verde "podrían reescribir completamente el mapa energético. En el futuro, al menos el 33% de la economía mundial podría funcionar con energía limpia sin pagar ni un céntimo más de lo que se paga por los combustibles fósiles". Ahora bien, añade Tengler, "la tecnología requerirá un apoyo continuado de los gobiernos para llegar a ese punto: ahora estamos en la parte alta de la curva de costes y se necesitan inversiones con apoyo político para llegar a la parte baja."
En cualquier caso, el analista cree que "para 2030 tendrá poco sentido económico construir instalaciones de producción de hidrógeno azul en la mayoría de los países.