Según Salvador Cámara, CEO de AvantForce, es el momento de realizar las modificaciones normativas que fomenten un ambiente de inversión favorable, con un marco regulatorio claro y predecible que ofrezca seguridad jurídica.
Es crucial ofrecer incentivos financieros y fiscales, como es la provisión de subvenciones directas que reduzcan el coste inicial de instalación y el establecimiento de créditos blandos para empresas que inviertan en la construcción de fábricas de componentes fotovoltaicos. Además, exenciones fiscales específicas para empresas que produzcan o utilicen tecnología fotovoltaica pueden estimular la inversión en este sector.
Otra área clave es la simplificación administrativa, reduciendo los trámites, eliminando barreras burocráticas y acelerando el proceso de obtención de permisos. Así como contar con un marco regulatorio claro y predecible que ofrezca seguridad jurídica y fomente un ambiente de inversión favorable.