Según un informe de KfW Research, el precio de la electricidad relativamente bajo en comparación con el gas es un factor importante para acelerar la adopción de bombas de calor en Alemania y Europa. El informe concluye que, en estas condiciones, las bombas de calor que funcionan con electricidad se utilizan con frecuencia a nivel europeo, incluso teniendo en cuenta las condiciones específicas de cada país.
Los datos de la encuesta del Barómetro de la Transición Energética de KfW Research corroboran esta tendencia, ya que los hogares citan la rentabilidad como un factor clave para el uso de bombas de calor.
Según los autores, un aumento constante del precio del CO2, que encarecería la calefacción a gas, podría contribuir a ampliar la brecha de precios entre la electricidad y el gas. Esto se espera como resultado de la expansión del sistema europeo de comercio de emisiones a partir de 2027.
Otra opción es ofrecer tarifas eléctricas para bombas de calor que varíen con el tiempo, de modo que funcionen en períodos en los que la electricidad sea abundante y, por lo tanto, los precios de la energía sean más bajos.
En los últimos diez años, las ventas de bombas de calor en Europa prácticamente se han cuadriplicado.
La industria de las bombas de calor ha pedido más seguridad de inversión para impulsar las ventas en el sector después de que las ventas cayeran un 45 por ciento en 2024 en comparación con el año anterior.