18 may 2025

VE y las bombas de calor pueden evitar 110 horas anuales de precios negativos

Por encargo de la cooperativa alemana de energía verde Green Planet Energy, la consultora Enervis investigó los efectos potenciales de las bombas de calor y los vehículos eléctricos sobre los precios de la electricidad, las reducciones de CO₂ y el uso de fuentes de energía renovables. El estudio
Flexibler Einsatz von Wärmepumpen und E-Fahrzeugen: Analyse der energiewirtschaftlichen Vorteile (Uso flexible de bombas de calor y vehículos eléctricos: análisis de las ventajas energéticas) analiza y cuantifica los conocidos efectos del uso de coches y bombas de calor para aumentar la flexibilidad de la red eléctrica y concluye que un control operativo específico, orientado, entre otras cosas, a tarifas eléctricas dinámicas, puede hacer que «la transición energética sea más eficiente en general y la electricidad más asequible para todos», según Carolin Dähling, responsable de política y comunicación de Green Planet Energy.

El consumo de energía se desplazaría deliberadamente de las horas punta habituales de mañana y tarde al mediodía. Un comunicado de Green Planet Energy afirma que no hay desventajas para los hogares afectados: «Los controles inteligentes garantizan que las bombas de calor precalienten, por ejemplo, mediante almacenamiento intermedio». En el caso de los coches eléctricos, es posible especificar la hora a la que deben cargarse sus baterías.

El estudio identifica resultados concretos alcanzables con este planteamiento: El número de horas con precios negativos de la electricidad podría reducirse una media de 110 al año entre 2025 y 2035, con los correspondientes efectos en la rentabilidad de los sistemas eólicos y fotovoltaicos. La cantidad de energía perdida por paradas podría reducirse en seis teravatios hora al año, «y también disminuiría el uso de centrales de gas natural, caras y perjudiciales para el clima».