19 ene 2018

El sector energético se reúne a puerta cerrada y sin el Gobierno para debatir sobre la transición energética

En las próximas semanas, el Gobierno deberá desvelar cómo será la transición energética en España. Para ello contará con las propuestas de la Comisión de Expertos, quienes presentarán varios escenarios que garanticen la competitividad de la economía, la creación de empleo y la sostenibilidad medioambiental.

Sin embargo, ¿cuál es la visión de los principales actores del sector energético? Este jueves, 17 de enero, Enerclub y la Asociación Española para la Economía Energética (AEEE) celebraron una jornada a puerta cerrada, “Escenarios Energéticos para España”, para que se pusieran las cartas sobre la mesa y se conocieran las posiciones de cada uno de ellos.

Hicieron su exposición expertos en regulación de las principales eléctricas, Iberdrola, Endesa y Gas Natural Fenosa (GNF), de las petroleras Cepsa y Repsol, del operador Red Eléctrica (REE), la gasista Enagás, pero también representantes de la consultora Deloitte, de Economics for Energy y del think tank energético de Podemos, el Observatorio Crítico de la Energía. Y como única representación de los movimientos sociales fue Greenpeace. Precisamente también asistieron dos miembros de la Comisión de Expertos, Pedro Linares, como co-fundador y director de Economics for Energy, y Cristóbal J. Gallego, del Observatorio Crítico de la Energía.

“Algunos elementos aparecen comunes en todos los actores, y es que en el largo plazo, a 2050, el escenario es 100% renovable aunque algunos no lo hayan dicho de manera explícita”, señalan fuentes asistentes al acto, “y por supuesto nadie entiende que para entonces haya energía nuclear o carbón, aunque solo Greenpeace y el Observatorio Crítico de la Energía apuntan en sus predicciones que se podrían estar cerradas todas para 2025”.

Greenpeace lleva defendiendo desde hace ya diez años su trilogía sobre el horizonte 2050, Energía 3.0, [R]enovables 100%, [R]enovables 2050, en la que España podría prescindir del carbón y de las nucleares en 2025 y conseguir que en 2050 el sistema energético sea completamente renovable.