Schneider Electric, especialista global en gestión de la energía y automatización, ha ganado el segundo premio en el Little Box Challenge, una competición global organizada por Google y IEEE[1] que proponía diseñar y construir un inversor de batería 10 veces más pequeño que los actuales.
El inversor es el dispositivo que permite convertir la energía de
paneles solares y baterías en corriente alterna para los hogares y
edificios. Los participantes tenían que ser capaces de crear un inversor
de 2kW reduciendo su tamaño actual –el de una nevera de picnic- hasta
aproximadamente el tamaño de una Tablet (655 centímetros cúbicos).
Los inversores tienen una importancia cada vez más elevada para la
economía y el bienestar de las personas debido al rápido crecimiento de
los sistemas fotovoltaicos, las baterías y otras fuentes de energía. La
reducción del tamaño de los inversores y de los costes de fabricación e
instalación ayudará a aumentar el número de hogares con sistemas
solares, a hacer más eficientes las redes de distribución y facilitará
el acceso a la electricidad en zonas remotas.