El Departamento de Energía (DOE) de Estados Unidos ha publicado la actualización de 2016 de su informe La revolución … ahora: el futuro llega para cinco tecnologías de energía limpia, en el que se recoge el impacto que están teniendo en el sector energético estadounidense cinco tecnologías clave del sector de las energías renovables tras décadas de inversiones e investigación por parte del Gobierno y de las empresas del país.
Y se ha producido el milagro: los costes de la eólica terrestre, la fotovoltaica a gran escala, la fotovoltaica distribuida, las lámparas LED y los vehículos eléctricos han caído entre un 41% -en el caso de la eólica terrestre- y un 94%, en el de las lámparas LED, desde el 2008. Estas increíbles reducciones de costes han permitido la adopción generalizada de estas tecnologías con un despliegue cada vez mayor en todos los ámbitos.
La combinación de energía eólica, fotovoltaica a gran escala y fotovoltaica distribuida representó más del 66% de toda la nueva capacidad instalada en el país en 2015. Las instalaciones totales de bombillas LED superaron los 200 millones de unidades, duplicando la cifra del año anterior, y las ventas acumuladas de vehículos eléctricos están a punto de superar el medio millón. Para hacerse una idea, el ahorro en la factura eléctrica producido por las bombillas LED fue de 2.800 millones de dólares en 2015.
El Departamento de Energía “en el mercado de almacenamiento de energía podrían alcanzar un valor de 2.900 millones de dólares para el año 2021, en comparación con los 350 millones de 2015”. Y eso sin considerar el impacto en los costes de la “segunda vida” de las baterías de los coches eléctricos. El DOE llama al alza del mercado de almacenamiento la “próxima revolución”, y no es para menos.
“La revolución de la energía limpia es demasiado a menudo algo que uno piensa que podría venir dentro de 10 o 20 años”, dijo el secretario de Energía, Ernest Moniz, tras la publicación del informe. Y añadió: “Pero el mensaje es: mire a su alrededor, está sucediendo ahora”.