El Volkswagen I.D. es un punto de inflexión para la marca de Wolfsburgo. Se trata del primer eslabón de la electrificación de Volkswagen, el primer paso que verá la luz en 2020 por 30.000€, para poner sobre la mesa su primer vehículo eléctrico de segunda generación, con una autonomía extendida de 400 a 600 kilómetros y capacidad de conducción autónoma. Es decir, el coche que marcará el futuro de las próximas décadas.
De este modo, este Volkswagen I.D. anticipa también la línea estética que lucirán los coches eléctricos de Volkswagen, con líneas fluidas y aerodinámicas que ayudan a mejorar la autonomía. Bajo el capó se encuentra un propulsor de 125 kW (168 CV)aunque este detalle casi pasa a un segundo lugar con la cantidad de elementos interesantes que monta este coche: por ejemplo, es el primer vehículo en estrenar la nueva Plataforma Modular Eléctrica MEB, sobre la cual, a buen seguro, también se desarrollarán en un futuro los vehículos de otras marcas del grupo, como Seat.