Según el tercer estudio sobre pobreza energética realizado por la Asociación de Ciencias Ambientales (ACA), el 45% de los hogares españoles destina el 20% de sus ingresos a la factura energética, cuando lo conveniente, según datos de ACA, sería que esa cifra no superara el 5%. Asimismo, durante los meses de invierno, en España se estima que el gasto de calefacción y agua caliente en el sector residencial supone el 46% del coste de la factura energética. Por otro lado, un estudio realizado por Gas Natural Fenosa recoge que el potencial de ahorro en este sector es del 27,4%, que podría alcanzarse mejorando los hábitos y el equipamiento de los hogares con sistemas de climatización eficientes que utilicen, además, energía procedente de fuentes renovables, como la bomba de calor.
En cuanto a las recomendaciones para reducir la factura energética sin renunciar al confort destaca la utilización de una tecnología eficiente, como la bomba de calor, que proporciona calefacción, refrigeración y agua caliente, incluso con un sólo equipo, utiliza energía procedente de fuentes renovables y disminuye las emisiones de CO2. Además, manteniendo una temperatura no superior a 21oC, según indica el RITE (Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios), ya que por cada oC que se incremente la temperatura en un edificio o vivienda, el consumo energético aumenta en un 7%.
¿Sabías que Greenpeace en 2011 eligió la bomba de calor como el mejor sistema de calefacción en lo que se refiere a eficiencia energética?
¿Sabías que la bomba de calor se encuentra entre las tecnologías citadas en el escenarioBlue Map de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) con el objetivo de reducir en el año 2050 las emisiones de CO2 a niveles equivalentes a la mitad de las emisiones del año 2005?
¿Sabías qué la bomba de calor es capaz de proporcionar calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria, incluso mediante un solo equipo, por lo que es útil durante todo el año?