La carrera solar fotovoltaica está absolutamente disparada en los cinco continentes. Según la Agencia Internacional de las Energías Renovables, el mundo instaló 145 gigavatios de potencia FV en 2021, 199 en 2022 y hasta 345,5 en 2023. Crecimiento brutal que este año 2024 va a volver a dispararse, porque, según las últimas estimaciones del equipo de analistas de Ember Climate, el mundo va a cerrar 2024 con casi seiscientos gigavatios solares nuevos instalados (593, concretamente). Es decir, que, en solo tres ejercicios (22, 23 y 24), el sector prácticamente ha triplicado la potencia instalada. A saber: instaló 199 en 2022; va a instalar 593 en 2024.
Europa va a otra velocidad. El llamado Viejo Continente sigue sumando a buen ritmo nueva potencia fotovoltaica bajo el Sol, pero su velocidad de crucero se ralentiza en algunos países. No en otros. En Italia, tercer mercado FV del continente en 2023, las instalaciones entre enero y julio han crecido un 41% con respecto al mismo período del año anterior. Alemania y Reino Unido, sin embargo, se conforman para ese lapso con sendos (mucho más modestos) +11%.
Portugal se dispara (ha instalado el doble en estos siete primeros meses del año; concretamente 2,3 veces más, como se aprecia en el gráfico que aparece bajo estas líneas, que en el mismo período del año pasado), pero ciertamente -reconoce Ember- es un mercado aún bastante pequeño en comparación con todos los citados hasta ahora (a finales de 2023, contaba con menos de 4.000 megavatios de potencia FV instalados).
El equipo de analistas de esta organización considera, a la luz de todo ello, que los compromisos climáticos están al alcance. "Las perspectivas para el resto de la década manifestadas por BNEF y SolarPower Europe están ahora alineadas con el Global Renewables and Energy Efficiency Pledge [compromiso global alcanzado en la última cumbre mundial del clima, CoP28], cuyo objetivo es triplicar la potencia eléctrica renovable de aquí a 2030".
Si el mundo alcanza ese objetivo (el 3xRenovables), ello significaría -apuntan desde Ember- que la energía solar generará una cuarta parte de la electricidad global a finales de década. En este escenario, la solar podría alcanzar, según Ember, los 6.000 gigavatios en 2030 (ahora estaríamos en el entorno de los 2.000). Los analistas recuerdan por otro lado que en la actualidad ya se dispone del doble de capacidad de fabricación de la que es instalada. "Es poco probable que el precio de los paneles solares limite el crecimiento futuro del mercado".
Hay retos por delante sin embargo. Los países que prevén crecimientos significativos de sus parques fotovoltaicos nacionales deberán derribar las barreras que pueden ralentizar ese crecimiento con el fin de que la integración de toda esa potencia solar sea viable. Así, es precisa una adecuada planificación de las redes eléctricas, así como el desarrollo de la correspondiente capacidad de almacenamiento para trasladar la electricidad generada en horario solar a otras franjas horarias. "Si estas acciones son llevadas a cabo -concluye Ember- la electricidad solar podría continuar superando fácilmente las expectativas a lo largo de lo que queda de década".