El Govern acaba de publicar, en el Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya, el Acord Gov/11/2017, de 7 de febrer, "que aprueba la creación de la Mesa de Impulso al Autoconsumo Fotovoltaico". ¿Objetivo? "Alcanzar una mejor y más rápida penetración de la energía solar fotovoltaica en Cataluña -mayoritariamente en techos solares de edificios o pérgolas fotovoltaicas- para avanzar hacia un sistema de generación eléctrica más limpio, más distribuido y con una mayor participación ciudadana".
El Acuerdo 11/2017 apuesta por el autoconsumo de energía eléctrica por una serie de beneficios que incorpora al sistema que cita explícitamente. Son estos.
1. Ayuda a la gestión de la demanda.
2. Lamina la curva de carga.
3. Reduce pérdidas en el transporte y la distribución.
4. Reduce saturaciones en las redes de distribución.
5. Contribuye con energía solar fotovoltaica a la cobertura de la punta de demanda en el verano.
6. Reduce inversiones en las redes de distribución.
7. Incrementa la aportación de las energías renovables al sistema sin coste económico regulado para este.
8. Contribuye a la reducción del precio marginalista del mercado eléctrico.
Por todo ello -dice el Acuerdo 11/2017-, la Generalitat de Cataluña debe dar a conocer las posibilidades del autoconsumo y facilitar su implantación. Según el Acuerdo 11, "el autoconsumo fotovoltaico contribuirá significativamente al desarrollo del nuevo modelo energético, en términos de incrementar la eficiencia energética y facilitar la integración de energías renovables en el sistema eléctrico, de reducir las emisiones contaminantes y de reducir la dependencia tan grande que tiene Cataluña de los combustibles fósiles y de la energía nuclear, a la vez que ayudará a satisfacer la creciente necesidad de almacenamiento de energía eléctrica renovable distribuida por el territorio".
La media docena de ejemplos