La Comisión adoptó ayer sus informes sobre el estado de la Unión de la Energía correspondientes a 2021, en los que, casi dos años después de la puesta en marcha del Pacto Verde Europeo, hace balance de los avances de la UE en la transición hacia una energía limpia. "Si bien algunas tendencias son alentadoras -reconoce la Comisión-, será necesario redoblar esfuerzos para alcanzar el objetivo de reducir las emisiones netas en al menos un 55% de aquí a 2030 y para lograr la neutralidad climática de aquí a 2050".