Los planes climáticos de los Estados miembro han quedado desfasados en menos de 1-2 años desde su aprobación. Deben actualizarlos en los próximos 12 meses si se quiere conseguir la transformación que se propone. El último informe de Monitor Deloitte, 'Acelerar la transición y la independencia energética en la Unión Europea', pone de manifiesto que para alcanzar el 80% de energía renovable en el sistema eléctrico europeo se requiere instalar 385 gigavatios (GW) adicionales a los 465 GW estimados, lo que supondría un fuerte incremento del 80%.
El estudio señala que Europa deberá quintuplicar el ritmo de reducción de demanda de energía y por tres la bajada de emisiones logradas hasta la fecha. Para lograr dichos objetivos, Deloitte indica que el ritmo de inversiones necesarias será "muy elevado", entre 1 y 1,3 billones de euros adicionales a los planes de cada país, "para lo que es necesario generar un entorno favorable de acceso a financiación, retornos sostenibles y seguridad jurídica".
El estudio también subraya que el éxito de este proceso de transición energética y de la consecución de una mayor independencia energética se sustenta en afrontar ocho retos transformacionales que, si bien no son comunes a todos los países, sirven como guía. Entre estos figuran modificar el comportamiento de los ciudadanos, desarrollar ecosistemas con diferentes agentes para desarrollar proyectos complejos, aprovechar la energía cercana y circular, atraer y transformar el talento, acelerar el despliegue tecnológico, hacer frente a las tensiones en la cadena suministro, atraer inversión privada y desarrollar una nueva regulación.