Desde 2016, cuando Grecia introdujo su marco de subasta competitiva para energía renovable y celebró su primera licitación fotovoltaica, el país ha adjudicado más de 2 GW de capacidad solar. Los proyectos adjudicados suelen participar en el mercado energético y obtener primas de alimentación variables, además de los precios del mercado. El valor de estas primas depende de una serie de variables del mercado, como el precio marginal, además de las tarifas fijadas mediante licitaciones competitivas.
Esta política sigue vigente hoy, pero a finales de abril, el parlamento griego votó una nueva ley (Ley 5106/2024) que permite al gobierno realizar subastas para propietarios de activos que estén dispuestos a aceptar tasas de reducción de energía más altas para sus proyectos. de lo habitual, así como instalaciones que incluyan sistemas de almacenamiento de energía.
La nueva política entrará en vigor el 1 de mayo, pero la Comisión Europea tendrá que aprobar el nuevo plan de subasta antes de que el gobierno griego pueda realizar las primeras licitaciones.
La nueva ley no define el porcentaje de reducción de electricidad para los proyectos adjudicados en futuras subastas. En cambio, la nueva ley permite al Ministerio de Medio Ambiente y Energía de Grecia establecer por separado el porcentaje de reducción de electricidad para los proyectos adjudicados en cada nueva subasta. De manera similar, el ministerio también definirá los requisitos para los sistemas de almacenamiento de energía en futuras subastas antes de cada ejercicio de contratación.