La tecnología de Nissan e-Power consiste en sacar todo el partido al ya habitual sistema eléctrico de Nissan, pero apoyando las baterías con un motor de gasolina que le aporta energía cuando es necesario.
Como ventaja obvia del sistema está la supresión de esa dependencia de cable y enchufe que tiene cualquier eléctrico puro, sin prescindir de la experiencia de conducción que da un eléctrico. Nissan afirma también que esta estructura suele necesitar un motor y una batería de mayores dimensiones, aunque aseguran que han "roto el código y aprendido a minimizar y reducir el peso, desarrollar métodos de control del motor más reactivos y a optimizar la gestión de la energía".
Como resultado de esas mejoras que anuncia Nissan, el e-Power utiliza una batería de menores dimensiones que la que incorpora el Leaf, sin sacrificar las ventajas del eléctrico de Nissan; entre otras, la entrega de par motor casi instantáneo. En cuanto a la eficiencia de su motor térmico de apoyo, Nissan promete un comportamiento "comparable a los híbridos convencionales más destacados", especialmente en trazados urbanos.