Según el estudio de la consultora noruega Rystad Energy España y Portugal tienen el potencial de convertirse en una nueva potencia energética europea debido a la gran capacidad actual y potencial de sus proyectos renovables, a que cuenta con un suministro de gas fiable desde el norte de África –principalmente, de Argelia, sin depender del gas ruso–, y a que el precio de la electricidad es más bajo que en el resto de Europa.
“Iberia está bien posicionada para competir –e incluso sustituir– al actual polo industrial energético del norte de Europa”, dice el informe. En concreto, España se convirtió en el tercer mayor exportador de energía de Europa en los tres primeros trimestres de 2022, solo por detrás de Suecia y Alemania.
Además, se espera que la región experimente un fuerte crecimiento en la generación de energía este año y mantenga un crecimiento sostenido en los próximos años, impulsado principalmente por la expansión masiva de las energías renovables. Según los cálculos de la consultora, la cuota de renovables en el mix energético ibérico aumentará del 48% en 2021 al 64% en 2025 y al 79% en 2030 [el PNIEC contempla el 74%], lo que sitúa a la región a la cabeza de la transición energética europea y la convertirá en “líder renovable de Europa”.
“Gracias a una combinación de inversión, geografía y política, España y Portugal han conseguido evitar o reducir el impacto de la crisis energética europea. Rystad Energy se centra en el mercado ibérico porque los fundamentos apuntan a que se convertirá en un centro energético-industrial de importancia regional”, concluye Carlos Torres Díaz, responsable de energía de Rystad Energy.