La compra de SolarCity daría lugar "a la única compañía energética del mundo verticalmente integrada que ofrece productos de energía renovable a sus consumidores". De esta forma, los consumidores podrían no sólo conducir un coche eléctrico fabricado por Tesla sino también producir la energía para recargarlo y extender esta ventaja a otros usos para el hogar o las empresas. "Con un Modelo S, Modelo X o Modelo 3, un panel solar y una batería Powerwall, se podrá distribuir y consumir energía de la forma más eficiente y sostenible hasta la fecha". "Existen tremendas sinergias entre ambas compañías", reconoció el consejero delegado de SolarCity.