La COP27 comienza en Egipto después de que Europa haya atravesado el verano más cálido registrado cuajado de olas de calor, se derrumbara un glaciar derretido en los Alpes y la temporada de incendios marcara una devastación récord.
Unos 200 países acuden a Egipto para la Cumbre del Clima COP27. Llegan tras un año en el que el planeta ha avisado de que se recalienta a ritmo acelerado. Olas de calor históricas, récords de temperatura, incendios y sequías recuerdan a los gobiernos que sus planes mejorados para contener el cambio climático no son suficientes.
España ha atravesado seis meses de calor extraordinario, rematado por el octubre más cálido jamás registrado. Pero eso solo ha sido la imagen cercana de un curso en el que el Norte global y en especial Europa se han asfixiado. Este 2022 ha dejado el segundo verano más caluroso en todo el hemisferio, pero el número uno en Europa. Acaba de saberse que el continente se calienta el doble que la media planetaria.
A pesar de aprobar un pacto hace 12 meses que reconocía que “es preciso una acción acelerada durante esta década” y que “hace falta recortar las emisiones de CO2 un 45% en 2030”, los compromisos reforzados que han presentado algunos estados –no todos– apenas quitan un 1% de CO2 respecto a las anteriores versiones, según el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente. “No se ha establecido ningún camino creíble para cumplir el objetivo de 1,5ºC de calentamiento máximo”.