Cuando concluya este año, la región latinoamericana, que involucra desde México hasta Tierra del Fuego, tendrá una capacidad instalada fotovoltaica de 2,7 GW, lo que significaría diez veces más a la que había en 2013, de acuerdo con un informe de la consultora británica IHS Markit.
"Los recientes precios mínimos ofertados -tan bajos como los 48 dólares por MWh en México- están atrayendo el interés de los gobiernos"