Madrid tendrá la que será la primera línea de autobús urbano eléctrico del país que se cargará por inducción a través del suelo y mientras está en servicio.
La EMT de Madrid licitó el pasado mes de mayo este proyecto, para el que ya se han presentado ofertas y que se enmarca en la estrategia de la promoción de la movilidad sostenible y libre de emisiones de la capital.
Los sistemas de carga por inducción de vehículos eléctricos evitan la instalación de cables de alta tensión o mobiliario urbano en la vía pública para ubicar postes de recarga.
Además, su instalación bajo el asfalto reduce su coste de mantenimiento, dado que experimentan menor deterioro y no están expuestos a adversas condiciones meteorológicas y posibles actos vandálicos.
El sistema no requiere que los conductores realicen tareas adicionales para recargar el vehículo, que toma energía de forma silenciosa y rápida, y ofrece un mayor confort a los pasajeros, dado que cuenta con un sistema de aceleración más uniforme y con menos vibraciones.