La aceleración de la electrificación a través del vehículo eléctrico, la climatización y los procesos industriales supondría una demanda adicional de 30 teravatios hora (TWh) y permitiría ahorrar hasta 6.710 millones de euros anuales a la economía española, según revela el informe "El Momento de la Electrificación: Energía Renovable para una Economía Competitiva", que ha sido presentado este jueves en Madrid por la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA Renovables) ante más de 200 profesionales del sector.
Las principales vías de electrificación (vehículo eléctrico, bombas de calor domésticas y comerciales, y procesos industriales) supondrían un incremento de demanda eléctrica de entre 20 y 30 TWh, apenas un 12% respecto al consumo de 2024, máxime teniendo en cuenta que, para cumplir los objetivos marcados, el PNIEC considera un incremento de demanda superior al 40% respecto a las cifras actuales.
Un hogar medio en España puede reducir sus costes energéticos anuales en un 64% –equivalente a 1.433 euros– al adoptar soluciones electrificadas como bombas de calor para calefacción y agua caliente, y contar con vehículo eléctrico. Además, esta transición permite una reducción del 83% en las emisiones de CO2, que podría alcanzar el 100% si la electricidad utilizada proviniese exclusivamente de fuentes renovables.
El informe destaca la eficiencia de las bombas de calor: alcanzan un rendimiento energético hasta cuatro veces superior al de las calderas de gas o gasóleo, generando un ahorro anual de entre 380 y 680 euros por vivienda. A pesar de su mayor coste inicial, las deducciones fiscales y programas de incentivos disponibles pueden reducir este obstáculo inicial, aumentando el ahorro hasta un 35%.
En el caso de los vehículos eléctricos, su adopción elimina la emisión directa de gases, con la consiguiente mejora de salud en las ciudades, y permiten ahorros de entre 900 y 1.000 euros anuales en costes energéticos frente a un vehículo de combustión interna. Estas ventajas compensan ampliamente el mayor desembolso inicial, una de las principales barreras de entrada. El informe desglosa también distintas medidas para acercarnos a las ambiciosas metas marcadas.
La industria española consume un 57% de su energía final para producir calor; proviniendo el 77% de esta energía de combustibles fósiles. La electrificación de procesos industriales a través de bombas de calor y otras tecnologías reduciría significativamente esta dependencia, abaratando costes y minimizando la exposición a la volatilidad de los precios del gas y el petróleo.
Por ejemplo, las bombas de calor industriales pueden cubrir hasta el 80% de las necesidades de calor en sectores como la alimentación, el papel y la química, ofreciendo un coste total de propiedad hasta un 61% inferior al de las calderas convencionales. Además, permiten recuperar la inversión en menos de cuatro años, consolidándose como una opción viable tanto económica como medioambientalmente.